jueves, 13 de enero de 2011

ORGULLO Y REFERENTE DEL MADRID


[foto by deportes.orange.es]

Sus dos metros cuatro nunca han sido un impedimento para su juego, sino todo lo contrario, le ha ayudado a convertirse en un gran reboteador. Pero es mucho más que eso. Su ambición le ha hecho evolucionar en la cancha y además de su habilidad para crear juego interior, buscar los huecos imposibles y convertir su tiro desde cuatro metros en el arma ofensiva más fuerte del Real Madrid, Felipe Reyes, ha logrado convertirse en un buen tirador que se atreve incluso con los lanzamientos desde 6,75 y… los anota.
¿Quién se lo iba a decir cuando comenzó a formarse como profesional en la cantera y el primer equipo del rival de la misma ciudad, el Estudiantes? Sin embargo, hoy Felipe Reyes es orgullo y referente del Real Madrid. Es vital en cada partido, no sólo por sus características que él define como “La agresividad y el espíritu ganador son mis cualidades más características como jugador”, sino también por su rol de capitán. Felipe consigue transmitir esa agresividad y espíritu a sus compañeros, así como la fuerza mental que le ayuda a superar los momentos más difíciles.

Y es que ya desde pequeño Felipe apuntaba maneras. Su hermano, Alfonso, fue quien le transmitió el amor por el baloncesto y quien se convirtió en su ídolo y su ejemplo a seguir. Y se lo tomó al pie de la letra, con tan sólo 19 años, fue campeón del mundo junior y bronce en el europeo un año después. Y todavía no era profesional. En su primer año en la ACB comenzaría a cosechar títulos: 1 Copa del Rey, 2 Ligas de la ACB, 1 Copa ULEB y los reconocimientos a su juego con los premios MVP de la final de la ACB en 2007 y MVP de la ACB en 2008.

Su casta y su temple le han convertido en un indiscutible también de la Selección Española, con la que se alzó Campeón del Mundo y dos veces de Europa, título que todavía ostenta. Los Golden Boys han regalado muchas sonrisas a los aficionados del baloncesto y se han gando el sobrenombre con triunfos como la Medalla de Plata de los Juegos Olímpicos (2008) 2 Medallas de Plata del Eurobasket (2003 y 2007) y 1 Medalla de Bronce del Eurobasket (2001). En todas estas ocasiones, Felipe ha estado ahí, alcanzando la gloria.

Cuesta creer que este jugador atrevido y descarado en la cancha sea una persona tan tímida que prefiere pasar inadvertida ante los focos y la atención, a no ser que la causa lo merezca. Y es que Felipe es muy solidario y lo ha demostrado participando en actos a favor de los niños del tercer mundo, de la pobreza y en actos con la Selección. No es de extrañar que se haya hecho con el corazón de todos los madridistas que tienen puesta toda su confianza en él, porque saben que es una apuesta segura.